•CAR impuso nuevas medidas a cultivadores que no habrían respetado la zona de ronda de 30 metros a cada lado de las fuentes hídricas en donde está prohibida cualquier actividad.
•Más de 3 hectáreas de zona de ronda podrían haber sido afectadas con actividades de arado para establecer el cultivo de papa.
•En la zona no se tuvieron en cuenta los mojones instalados por la CAR que delimitan el área desde donde inicia la zona de ronda.
Bogotá, D.C., 06 de febrero de 2025. La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), impuso una medida preventiva e inició trámite sancionatorio a los propietarios de cuatro predios cultivados con papa que, al parecer, invadieron zona de ronda de dos fuentes hídricas que desembocan en el río Teusacá, en el municipio La Calera.
Cabe recordar que la normatividad ambiental determina que las fuentes hídricas deben tener un espacio de 30 metros a lado y lado del cauce, en donde no está permitida ninguna actividad.
Al amparo de esta obligación, un equipo técnico y jurídico de la dirección regional Bogotá – La Calera de la CAR, en desarrollo de uno de sus recorridos de vigilancia y control pudo evidenciar de estos cultivos estarían irrespetando este límite, situación que en el terreno les permitió recolectar información detallada que quedó consignada en el informe técnico que sustenta la medida preventiva impuesta, para que de manera inmediata se suspendan las actividades agrícolas en la zona de ronda.
De acuerdo con información suministrada por un particular que atendió la diligencia, el cultivo ocuparía unas 200 fanegadas aproximadamente (equivalentes a 128 hectáreas), aunque al momento de la visita el avance de siembra estaría entre 40 y 60 hectáreas (algunas de ellas ya se encontraban cultivadas y otras, en proceso de preparación del terreno).
En el primer predio visitado, se encontró que la zona del cultivo está rodeada de cobertura vegetal nativa y se pudo corroborar que se intervino la franja de protección de una corriente hídrica.
En otras palabras, el arado y el cultivo estaban a escasos metros del cauce principal de la quebrada. En este punto se estima que la afectación sería de más de 24 mil metros cuadrados.
El segundo punto donde se hizo énfasis corresponde al ubicado en la parte baja de uno de los predios, donde se evidenció la realización del arado dentro de la ronda hídrica del río Teusacá. Allí se evidenció la presencia de los mojones que demarcan la delimitación de la ronda, los cuales no fueron tenidos en consideración al momento de realizar el cultivo. El daño aquí sería de alrededor 8.700 metros cuadrados.
La directora regional Bogotá – La Calera, de la CAR, Sandra Milena Santafé Patiño aseguró que la zona donde se adelanta el cultivo hace parte de la Reserva Protectora de la Cuenca Alta del río Bogotá y señaló que “es necesario resaltar la importancia de este ecosistema y el respeto que se debe tener respecto a los límites que deben existir en las fuentes hídricas. Más de 3 hectáreas resultaron afectadas por las malas prácticas de descapote y de utilizar maquinaria para la preparación del cultivo sin respetar la zona de ronda”, puntualizó la funcionaria.