La actividad se desarrollaba en una reserva forestal cercana a la capital colombiana, en una zona donde está prohibido el desarrollo de este tipo de cultivos.

En la vereda Santa Helena, ubicada en el municipio de La Calera, sector El Peñón, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) evidenció una importante afectación ambiental derivada de varios cultivos de papa, sembrados en una extensión aproximada de 50 hectáreas, que estaban afectando a este ecosistema ubicado dentro de una reserva forestal donde se encuentran zonas de páramo y subpáramo, en las que está prohibido el desarrollo de esta actividad.

En un operativo ejecutado conjuntamente entre la autoridad ambiental, la Alcaldía Municipal de La Calera y la Policía, se evidenció el desarrollo de la actividad, con la que se causaba impacto a varias fuentes hídricas presentes en la zona. En este sentido, la CAR adelantará el respectivo trámite sancionatorio ambiental.

Continuamos ejerciendo nuestra autoridad ambiental, buscando evitar que actividades como esta, que están prohibidas en zonas de páramo, sigan afectando nuestros recursos, especialmente fuentes hídricas; como lo evidenciamos con estos cultivos intensivos desarrollados”. Indicó Sandra Riveros Barbosa, directora de la Dirección Regional Bogotá – La Calera de la CAR.

La CAR resalta que, respecto a los usos del suelo en zonas de páramo, no está permitido ningún tipo de actividad agropecuaria, dado que esto hace que se remueva la cobertura de vegetación nativa y se afecten estos ecosistemas fundamentales para la conservación del agua.